sábado, 7 de noviembre de 2015

Cuento de Halloween (sexta parte)


Caminando fuera ya del bosque entre onduladas colinas, cargando un enorme paquete de olor asqueroso que la renguita le había dado, y recreando una y otra vez la entrevista con la bruja, Vito apuraba el paso porque quería llegar al pueblo antes de que anocheciera y repartir por lo menos por la plaza y las calles principales su inmunda carga que al menos protegería a los apáticos pobladores de la visita de vampiros y de licántropos. La asistente le había regalado también una bolsa con algo así como una plateada ceniza, recomendándole o rogándole más bien que con esa sustancia abonara las moreras de la viuda Robles dado que si esos arbustos no daban frutos y la viuda no preparaba la mermelada que tanto agradaba a su patrona ahí sí que esta se pondría de pésimo humor. Vito sonreía un poco para sí preguntándose cómo sería ver a esa enojada bruja de "pésimo humor" mientras atravesaba un prado donde pastaban bellas y blancas ovejas cuando una de ellas, algo corpulenta le cortó el paso. Era un animal precioso, su pelaje era increiblemente blanco y sedoso y parecía tener la lana bastante crecida a pesar de que estaban en otoño. Vito la quiso rodear pero otra oveja tan bonita como la anterior también le impidió seguir caminando y al girar notó que detrás tenía dos y otras dos al costado siendo unas más hermosas que las otras.En un instante se dio cuenta de lo que sucedía: Como estaba cayendo el sol unas pastoras las estaban reuniendo para guardarlas y él había quedado encerrado por la majada. Con cuidado trató de abrirse paso empujando suavemente a uno de los animalitos y al tocarlo sintió que un objeto colgaba de su cuello: Era un colorido atrapasueños. Miró a otra de las ovejas y notó que ésta también portaba uno y cuando comenzó a examinar a todos los miembros del grupo se percató de que efectivamente cada ovejita llevaba un atrapasueños en el cuello . No pudo ni reaccionar casi porque se acercaba a él una de las pastoras, una muchacha muy joven y rozagante con el cabello trenzado cara simpática y ojos divertidos, de cuya oreja, a modo de pendiente ¡También colgaba un atrapasueños!
M

No hay comentarios: